domingo, 3 de noviembre de 2013

LEY DE MEDIOS, EL ANALISIS

Buenos Aires. A casi una semana del fallo emitido por la Corte Suprema en favor de la ley de medios de la democracia, resulta interesante entender la importancia de este fallo mas allá de que, por supuesto, la ley puede tener algunos puntos inconsistentes o con "baches legales" que habrá que corregir en alguna próxima ley que mejore la actual.

Resulta muy tranquilizador para la sociedad que la corte haya fallado siempre pensando en la sociedad porque esto es lo que ha ocurrido. Así como la ley que pretendía controlar a los jueces por el voto popular fue denegada y que era buscada por el gobierno, la ley de Medios es un golpe duro para Clarín y marca el fin de la era Magnetto. A partir de ahora, para los gobiernos venideros, un grupo mediático no podrá utilizar su fuerza persuasiva ni intimidar a nadie. A partir de ahora, comienzan los limites para "el cuarto poder", que es la prensa.

Para quien no lo sepa, no hay información ni periodismo independiente. Las realidades se construyen discursivamente de acuerdo a necesidades. Lo hemos comprobado tanto con medios oficiales como independientes. Es decir, a partir de un hecho, hemos visto como quien esta encargado de la alocución, genera un pensamiento distinto y lo plasma en un diario, en radio o tv que impacta de lleno en nuestro alocutario. Esto no es visible por las personas sean de clases altas o bajas. La información viene digerida y procesada. Lista para consumir.  En suma, las noticias como explica Stella Martini en su libro "periodismo, noticia y noticiabilidad" son una construcción.
Clarín no esperaba esta sentencia y hoy es el único grupo que no había ofrecido una adecuación a la ley de medios. Por supuesto que otros grupos aún no se han desmantelado pero se han avenido a la ley y de hecho, el grupo Vila-Manzanno había desistido de seguir el tema por vía judicial.
Esta semana el grupo Clarín con fuerte presencia en los diversos medios que posee y con gran audiencia por las torpezas que ha cometido del gobierno de comprar cuanto medio tuviera una audiencia considerable, o mejor dicho, facilatarle a algún empresario amigo, terminó llevando al holding de Magnetto a concentrar mas del 50% del share en radio, por dar un ejemplo, utiliza como defensa a periodistas de gran renombre (que también tienen intereses y jugosos sueldos que renuevan año a año) y espetó como defensa "la ley de expresión" y que esta ley buscaba desinformar, etc.
Por supuesto que hay cuestiones a corregir como la salida de Sabatella, el no generar una presión ni una adecuación de oficio que no tiene sentido alguno porque al final de cuentas, lo importante, es que hoy o en 2 años este medio debe liberar licencias para que nuevas voces, acalladas y sin posibilidades puedan informar su visión de la realidad a la opinión pública.

 Ahora bien, cuando se utiliza un poder mediático para meter miedo o preguntarle a la gente si esta de acuerdo con ley del gobierno cuando es sabido que la ley fue consensuada y aprobada tmb por partidos opositores, es tomarle el pelo a la gente. Algunos no tendrán memoria pero yo sí. Perdoname Clarín pero esta no te la dejo pasar. Leo Clarín, leo La Nación, leo La Prensa y si quiero, leo Tiempo Argentino, Página 12, etc.

La función de un periodista, es informar, formar y entretener, entre otras pero nunca utilizar a la sociedad para librar una batalla que no tiene sentido y menos para defender sus intereses económicos.
La ley de Medios no es una ley K, es una ley para todos que bien aplicada generará nueva información, mas opinión, mas puestos de trabajos y como colofón, mas libertad de expresión y democracia.


El autor es Licenciado en Comunicación Social y periodista especializado en politica nacional.